Decidí hacerme un perfil en Tinder. Por mis fotos es
obvio que soy gorda y también lo dejé claro en mi descripción; pensé que eso me
ahorraría problemas. Tuve “compatibilidad” con un hombre un par de años mayor
que yo. La conversación fluyó un par de horas, hasta que me preguntó: “¿Qué te
gusta sexualmente?”. Me hice la tonta y le contesté: “Ja ja ja”. Entonces sus
chat dieron un giro y empezó a decirme que debía estar agradecida por tener la
oportunidad, siendo una “gorda fea”, de hablar con un hombre como él. Lo único
que hice fue “Anular compatibilidad”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario